La opositora María Corina Machado le ofreció al chavismo garantías y salvoconductos para que deje el poder. La represión y los bloqueos en internet mantienen en vilo a los venezolanos.
El 10 de enero de 2025, es el día que le corresponde a la toma de posesión del presidente electo de Venezuela. Ese día, el país “tendrá en Edmundo González Urrutia su nuevo presidente y comandante en jefe». Así, por lo menos, lo cree María Corina Machado, quien le ha ofrecido a Nicolás Maduro «garantías, salvoconductos e incentivos» para que deje el poder.
La postura de Machado supone un giro en su discurso, que hace unos años era más radical y pedía cárcel y castigo para los jerarcas del chavismo. Sin embargo, al parecer ha emprendido un proceso en el que la clave es la negociación, aunque, de momento, no se conocen los términos y si realmente está avanzando.
No sabemos qué incentivos está ofreciendo el equipo de Machado y la comunidad internacional a Maduro y a los otros miembros del Gobierno, pero son muy difíciles que sean aceptados porque eso significaría reconocer de una u otra manera de que lo que se ha hecho hasta ahora con el CNE es entonces una manipulación de la voluntad popular
Maduro, por su parte, parece alejar las posibilidades reales de diálogo e incluso se ha negado a los ofrecimientos que le han hecho, como la oferta del presidente de Panamá, José Mulino, sobre un asilo político en su país. Al parecer el chavismo está negado a cualquier cosa que no sea permanecer en el poder aún si eso incluye la fuerza y represión que ya deja más de 2.000 detenidos, 22 muertos y mucho miedo entre los ciudadanos.
“Se deja llevar por los gringos, muy lamentable que haya empezado con mal pie. Presidente de Panamá, trataré de aprenderme su nombre, pero quien se mete con Venezuela, se seca”, le respondió Maduro a Mulino.
El viernes, al salir del Tribunal Supremo de Justicia -controlado también por el chavismo y del que se espera una sentencia que respalde el triunfo del oficialismo- Maduro dijo que la «única negociación» con Machado es que la opositora se «entregue ante la justicia”. Y agregó que el único que tiene que negociar en este país con Machado es el fiscal general. “Que se entregue ante la justicia, dé la cara y responda por los crímenes que cometió. De verdad es la única negociación que cabe aquí», sentenció Maduro.
“Que se entregue ante la justicia, dé la cara y responda por los crímenes que cometió. De verdad es la única negociación que cabe aquí
Maduro fue declarado ganador de las elecciones del pasado 28 de julio tras el cuestionado aval del Consejo Nacional Electoral (CNE) de mayoría chavista. Sin embargo, hasta la fecha, el CNE no ha mostrado las actas que ratifican dicha victoria. De hecho, el único rector opositor del ente electoral se encuentra bajo perfil de las autoridades porque ha recibido amenazas en los últimos días.
Además, el CNE suspendió tres auditorías obligatorias para validar los resultados en los que, según ellos, Maduro ganó con 6’408.844 de votos mientras que el abanderado de Machado, Edmundo González, obtuvo 5’326.104. El organismo alegó que un ataque cibernético a sus sistemas ha impedido la publicación detallada de los datos, algo que no ha podido ser demostrado, tal como lo aclaró el Centro Carter, cuyos observadores salieron del país y luego declararon que los datos indican que el ganador es González y no Maduro.
La oposición, en cambio, publicó las actas en un sitio web y concluyó que González ganó con 7’303.480 votos frente a 3’316.142 de sufragios de Maduro. Y es que, ese 28 de julio, cientos de miles de opositores repartidos por todo el territorio venezolano recopilaron las actas que emiten las máquinas de votación en cada puesto para certificar su victoria. Esas son las mismas que hoy debe tener el chavismo y que se niegan a dar a conocer al público.
Esto impulsó las reacciones de la comunidad internacional y Colombia, Brasil y México -con el respaldo de Estados Unidos- buscan una salida pacífica. Además, los tres países latinoamericanos fueron enfáticos en su último comunicado, en el que exigen que sea el CNE y no el TSJ el que valide los resultados.

Galopante incertidumbre
Lo cierto, hasta ahora, es que la incertidumbre avanza sobre Venezuela, una nación que lleva varios días con bloqueos a internet ordenados por Maduro y ejecutados por la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel). No funciona la red social X, Microsoft Teams, portales informativos (como EL TIEMPO) y otros más. Solo es posible acceder a ellos con VPN (una red privada virtual), pero que no toda la población sabe usarla.
En las zonas populares, los civiles armados llamados colectivos chavistas mantienen bajo una especie de toque de queda a los ciudadanos impidiendo las protestas que orgánicamente se empezaron a formaron durante la semana pasada.
Al tiempo, analistas tienen miedo de emitir opiniones por temor a ir a la cárcel y a seguir el camino de opositores cuyas detenciones han quedado registradas en videos en vivo, como es el caso de María Oropeza, dirigente de la oposición en Portuguesa capturada el martes en la noche. Pese a ello, pronostican que es difícil que Maduro acepte emprender una negociación que supondría aceptar una derrota en las urnas.
“No sabemos qué incentivos está ofreciendo el equipo de Machado y la comunidad internacional a Maduro y a los otros miembros del Gobierno, pero son muy difíciles que sean aceptados porque eso significaría reconocer de una u otra manera de que lo que se ha hecho hasta ahora con el CNE es entonces una manipulación de la voluntad popular”, dice a EL TIEMPO un analista experto en negociación que prefirió reservar su identidad.
Machado ha dicho que los puntos claves para una negociación son el reconocimiento de resultados del 28 de julio, una transición democrática, ordenada y estable. Otorgar garantías, salvaguardas e incentivos y que en el proceso participen los líderes en los que el pueblo confía también son puntos base para la oposición.

“Se deja llevar por los gringos, muy lamentable que haya empezado con mal pie. Presidente de Panamá, trataré de aprenderme su nombre, pero quien se mete con Venezuela, se seca
“Si el gobierno no siente que más allá de los incentivos, hay una presión realmente efectiva o que internamente haya un colapso del sistema, va a ser muy difícil que el Gobierno dé su brazo a torcer”, por eso “la comunidad internacional tiene obligatoriamente que presionar tanto a personas como a instituciones del Gobierno venezolano”, insiste el analista.
Para otros, “las verdaderas negociaciones ni se saben ni se conocen. El único que tiene posibilidades de ofrecer algo cuantioso y de calidad como alternativas para ceder el poder a Nicolás Maduro serían los Estados Unidos”, dice a EL TIEMPO el analista político Carlos Zambrano.
Para este experto, la administración estadounidense es quien tiene la potestad de levantar las sanciones que molestan a los jerarcas del chavismo porque “Machado no posee las herramientas, aunque en efecto encarne un liderazgo emocional y de canalizaciones de voto castigo al establecimiento político tradicional”.
Maduro aseguró el viernes que “no es fácil” hablar con un representante de Estados Unidos, porque además hay “vacío de poder”. “Ellos sí están en una transición, no se sabe para dónde. Siempre estaremos listos para hablar, no como esclavos, no como colonia”. Maduro también reveló que “muchos” en Estados Unidos lo llaman.
Aunque no se conocen a fondo los incentivos que ahora se estarían ofreciendo, en junio, Jorge Rodríguez, jefe del comando de campaña de Maduro, aseguró que “los gringos” llevaban tiempo ofreciendo incentivos.
“A mí me lo dijeron en México en una reunión que los gringos pidieron. Maduro me dijo ve a ver qué quieren esos gringos”, dijo Rodríguez y luego agregó que los estadounidenses (no mencionó cuáles funcionarios) ofrecieron a Maduro “escoger el país del mundo al cual se quiera ir”.

“Le damos los millones de dólares. A la primera combatiente, Cilia Flores, le tenemos una mansión en República Dominicana, no le vamos a tocar”, reveló Rodríguez al tiempo que dijo que la respuesta de Maduro siempre ha sido mandar “al carajo a los gringos”.
Pero Maduro, al ser interpelado por periodistas al salir del TSJ, sobre los ofrecimientos estadounidenses, respondió: “Dame respeto a Venezuela, respeta esta Constitución, respeta la patria de Bolívar. No te metas en asuntos internos de Venezuela, es lo único que le pido, que me den lo que sea. Si Estados Unidos me concediera tres deseos, yo le pediría respeto a la democracia venezolana, respeto a la independencia y que lleguemos a un acuerdo de entendimiento por 50 años”.
Por lo pronto, la oposición promete no abandonar la lucha por defender el resultado de las urnas y convocó a una “gran protesta mundial por la verdad” el próximo sábado 17 de agosto.
DETRÁS DE LA NOTICIA
Para la elaboración de este artículo, EL TIEMPO entrevistó a analistas de Venezuela y consultó fuentes confidenciales y testimonios de ciudadanos en Caracas. También accedió a las publicaciones de la Cancillería de Colombia e informes de la ONG VE Sin Filtro.
Caracas, Venezuela.
REFERENCIAS
Estados Unidos le ofreció incentivos a Nicolás Maduro para que deje el poder en Venezuela: ¿qué le propusieron? Consultado en agosto de 2024.
Crisis en Venezuela: ¿a qué se expone el opositor Edmundo González tras faltar a citación del Tribunal Supremo de Justicia? Consultado en agosto de 2024.
Resultados de las actas de la oposición. Consultado en agosto de 2024.
Ana María Rodríguez Brazón
Corresponsal de EL TIEMPO en Caracas