La trama encabezada por Víctor de Aldama y Koldo García Izaguirre, revela un sofisticado entramado de corrupción y tráfico de influencias que vincula al gobierno de España con el de Nicolás Maduro.
Desde el aeropuerto de Barajas, con la connivencia del Ministerio del Interior, se facilitaron ingresos irregulares de empresarios y cercanos al régimen venezolano para establecer negocios en España. Estos «invitados», como Alejandro Ceballos, prominente constructor de Venezuela, llegaron a participar en reuniones ministeriales en Madrid.
La documentación evidencia una conexión entre estas operaciones y figuras clave del PSOE, como el exministro José Luis Ábalos.
La trama no solo apunta a un esquema de lavado de dinero, sino también a un acuerdo tácito que permitió lucrar a ambas partes, incluso en sectores sensibles como hidrocarburos y construcción.
Esta red no solo perpetúa la impunidad del régimen venezolano, sino que compromete la transparencia en España.
Azalea Liscano Henríquez.