Un reciente estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Wrocław sugiere que el sentido del olfato desempeña un papel mucho más crucial de lo que se pensaba en la compleja red de la atracción interpersonal. Contrario a la creencia popular que a menudo prioriza la apariencia física, los hallazgos indican que el aroma corporal, y notablemente el uso de perfume, podría tener una influencia preponderante en cómo percibimos a otras personas.
Según los científicos detrás de la investigación, la razón fundamental de este impacto reside en la conexión directa del olfato con áreas cerebrales intrínsecamente ligadas a la memoria y las emociones. Esto implica que un aroma agradable no solo aumenta la percepción de atractivo de un individuo, sino que también refuerza su recuerdo en nuestra mente.
El estudio va incluso más allá, apuntando a una fascinante correlación entre la «química olfativa» y la solidez de las relaciones. Aquellas parejas que reportan una fuerte conexión a través del sentido del olfato tienden a experimentar vínculos más estables y satisfactorios a largo plazo.
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