Una prometedora vacuna contra la enfermedad de Lyme ha demostrado alta eficacia en ensayos clínicos. Esta noticia sugiere un avance significativo en la prevención de esta enfermedad transmitida por garrapatas, que puede causar síntomas debilitantes.
La alta eficacia observada indica un potencial importante para proteger a las personas de contraer la enfermedad de Lyme, lo cual es un gran paso para la salud pública. Se anticipa que esta vacuna podría reducir considerablemente la incidencia de la enfermedad.
Una nueva vacuna contra la enfermedad de Lyme, identificada como VLA15, ha demostrado ser segura y generar una respuesta inmune robusta en niños, adolescentes y adultos de hasta 65 años, según resultados preliminares publicados en la plataforma para profesionales de la salud Medscape. Los hallazgos, que forman parte de un estudio de fase 2, ofrecen una nueva esperanza para la prevención de esta infección transmitida por garrapatas, destacando una notable efectividad, especialmente en los grupos de edad más jóvenes.
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La investigación, cuyos datos fueron difundidos en la revista científica The Lancet en abril de 2025, se encuentra actualmente en una etapa avanzada de ensayos. Para evaluar la efectividad del suero experimental, los especialistas analizaron una muestra de 625 personas, incluyendo niños y adultos. Los participantes fueron asignados aleatoriamente a distintos grupos: uno que recibió un esquema completo de tres dosis, otro con solo dos, y un grupo de control que no fue inoculado.
El objetivo del equipo científico era medir la respuesta del sistema inmunológico de los voluntarios frente a la proteína de superficie externa A (OspA), una estructura clave de la bacteria causante de la enfermedad de Lyme. Estas mediciones se realizaron entre siete y doce meses después de la primera dosis, mientras que los posibles efectos adversos fueron monitoreados de cerca durante la semana posterior a cada inyección para garantizar la seguridad del compuesto.
Los resultados revelaron que la vacuna generó una respuesta inmune significativamente mayor en comparación con el grupo no vacunado. Esta reacción fue aún más pronunciada en los individuos que recibieron las tres dosis recomendadas. De manera destacada, la investigación concluyó que la respuesta inmunológica fue más sólida en niños y adolescentes, lo que sugiere un nivel de protección superior y más duradero para las poblaciones más jóvenes.