Un reciente estudio genético ha encendido las alarmas sobre un popular hábito matutino, al sugerir que el consumo de café instantáneo podría incrementar significativamente el riesgo de desarrollar degeneración macular seca relacionada con la edad (DMRE), una de las principales causas de ceguera en adultos mayores. La investigación, publicada en la revista científica Food Science & Nutrition por un equipo de la Universidad Médica de Hubei, establece por primera vez una posible relación causal entre la ingesta de este tipo de bebida y el deterioro de la mácula, la parte del ojo responsable de la visión central y detallada. ![]() Para llegar a esta conclusión, los científicos emplearon una técnica avanzada conocida como aleatorización mendeliana. Este método utiliza variantes genéticas como un indicador del nivel de exposición de una persona a un factor determinado —en este caso, el consumo de café instantáneo— para determinar si existe un vínculo causal con una enfermedad específica. Este enfoque permite minimizar la influencia de otros factores de estilo de vida que podrían confundir los resultados, fortaleciendo la evidencia de que la bebida misma podría ser un factor de riesgo directo para la DMRE seca, una condición que dificulta tareas cotidianas como leer, conducir o reconocer rostros. La clave de esta asociación parece residir en el proceso de fabricación del café soluble. A diferencia del café molido tradicional, el café instantáneo se somete a procesos industriales intensivos, como la deshidratación a altas temperaturas, que alteran su composición química. Los investigadores postulan que estos procedimientos podrían generar compuestos adicionales, como la acrilamida u otras sustancias potencialmente dañinas, que no se encuentran en la misma medida en el café de grano. Es importante destacar que el estudio no encontró una asociación similar de riesgo con el consumo de café molido ni con el descafeinado. Si bien estos hallazgos no implican que cada consumidor de café instantáneo desarrollará problemas de visión, sí representan una advertencia importante, especialmente para aquellas personas con predisposición genética o antecedentes familiares de enfermedades oculares. Los autores del estudio sugieren que reducir la ingesta de café soluble podría ser una medida preventiva para disminuir la incidencia de la degeneración macular seca. |
Estudio asocia el consumo de café instantáneo con un mayor riesgo de ceguera
