Las actividades escolares, se reinician en todo el territorio nacional, pero lamentablemente los trabajadores de la educación continúan enfrentando dificultades económicas y laborales. Esta situación ha sido reflejada por líderes sindicales, quienes destacan que la situación de estos trabajadores es precaria y requiere atención urgente.
El presidente de Sindicato de Educadores Regionales (SER Carabobo) filial de Fetrasined, José Gregorio Medina, aseguró que el próximo martes 7 de enero se reinician las actividades escolares en todo el territorio nacional, pero lamentablemente los trabajadores de la educación siguen pasando penurias.
Las principales quejas de los trabajadores de la educación suelen incluir:
- Salarios bajos: Muchos educadores indican que sus salarios son insuficientes para cubrir sus necesidades básicas y las de sus familias.
- Falta de recursos: Las escuelas a menudo carecen de materiales didácticos, tecnología, y adecuaciones necesarias para llevar a cabo una enseñanza efectiva.
- Condiciones laborales: Muchos docentes trabajan en ambientes laborales poco favorables, con aulas sobrepobladas y falta de apoyo administrativo.
- Falta de reconocimiento: Los trabajadores de la educación a menudo sienten que su esfuerzo no es valorado ni reconocido por el sistema educativo.
- Inestabilidad laboral: En algunos casos, la falta de contratos fijos y la incertidumbre sobre su futuro laboral generan estrés.
- Capacitación insuficiente: Muchos demandan oportunidades de formación continua para mejorar sus habilidades y prácticas educativas.
Estas quejas reflejan un descontento generalizado que podría afectar la calidad de la educación y el bienestar de los estudiantes.
Explica que esta situación se presenta porque el Ejecutivo nacional no da respuestas al pliego de peticiones pendientes por parte de la base magisterial, que van desde el 280% de deuda del segundo contrato colectivo.
Tampoco ha retomado la discusión de la tercera contratación colectiva única y unitaria, que es donde están cifradas las esperanzas de los trabajadores educacionales, para tener remuneraciones económicas acorde a la realidad actual del país.
Es una calamidad diaria que vive cada maestro en su hogar pues debe, en muchos casos, recurrir a otros trabajos para poder solventar la grave crisis salarial que atraviesa.
El dirigente magisterial le recuerda al ministro de Educación, Héctor Rodríguez y al presidente Maduro, que la inflación galopante ha liquidado al salario y es urgente un ajuste salarial para posteriormente reiniciar la discusión de la contratación colectiva de todo el sector educativo.