
El Don de Gentes de Luis Velásquez Alvaray nadie puede negarlo. Poseer esa calificación no es una alabanza a un amigo que recién ha pasado a otro plano. Es el reconocimiento sincero hacia una persona que aún después de fallecer tendrá en nuestro recuerdo el valor de haber sido un hombre con cualidades humanas propias de un ser que vivió en una eterna lucha por trascender y ser útil a los demás. Esas apreciaciones permiten decir que realmente tenía: Don de gentes.
Nuestra amistad germinó y fue consolidándose dentro de cánones del respeto y amistad fraterna. Él, era una persona con cierta carga de nerviosismo, pero ello no era óbice para dudar de su amistad y fidelidad. Fue una persona muy preparada, culta, polémica, pero sincera y diáfana en sus decisiones y actuaciones. Polifacético profesional: Periodista, Sociólogo y Abogado, con numerosos títulos de postgrado a nivel nacional e internacional. Profesor e investigador universitario (ULA). Escritor y político venezolano. Articulista de opinión en diferentes periódicos nacionales e internacionales. Ponente.
Todos esos conocimientos y virtudes personales lo llevaron a cargos muy importantes de Venezuela, entre ellos, fue diputado a la Asamblea Nacional (AN), Magistrado del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), director de la Dirección Ejecutiva de la Magistratura (DEM) y presidente de la Comisión Judicial. Su acción social la puso de manifiesto al desempeñarse como locutor de Estaciones de Radiodifusión venezolana. Así era Luis.
Luis Velásquez Alvaray, fue mi amigo fraterno. Y, esa amistad fue consolidándose con un respeto y consideración mutuo con el paso de los años, hasta y después de su partida.
Sin embargo, inevitable es el que todos seamos objeto de la mirada inquisitiva, una suerte de “ojeriza” perversa, desnaturalizada por la envidia, porque lastimosamente el “Árbol que da frutos, recibe más piedras”. Lo digo porque no faltará alguien que posiblemente actúe cual ave de rapiña. Aun aquellos que, habiendo sido favorecidos por su aquiescencia y bondad, sean en estos momentos unos verdaderos e ingratos seres. Pobres. Esa es su naturaleza. Pero, prefiero hacer a un lado esa aprehensión, pues no es el motivo de estas líneas.
Colofón de mis palabras, es el expresar nuestra tristeza, condolencias y solidaridad, uniéndonos a la aflicción y dolor de la familia Velásquez-Gómez, a Benji, su esposa, sus hijos y demás familiares, por el sensible fallecimiento del Dr. Luis Velázquez Alvaray.
Por tanto, nuestras más sinceras palabras de condolencias y solidaridad, extensivas a familiares y amigos. en estos momentos tan difíciles, rogando a Dios les de consuelo por tan irreparable pérdida.
PAZ A SU ALMA
Calgary, Canadá, 17 de mayo 2025