Familiares de «presos políticos» venezolanos entregaron este viernes 18 de julio una carta en la Nunciatura Apostólica de Madrid para protestar contra el «régimen de Nicolás Maduro» y pedir apoyo internacional para la liberación de los encarcelados, una acción que también se lleva a cabo en otros países.
La carta se entrega este viernes también en las nunciaturas de países como la propia Venezuela, Ecuador, Colombia, Alemania y Portugal, con motivo de la canonización del laico José Gregorio Hernández y la religiosa Carmen Rendiles en octubre.
En declaraciones a los medios, el excalde de Caracas Antonio Ledezma y Diana Merchán, dirigente del partido Voluntad Popular, ambos exiliados en España, coincidieron en que es necesario que la comunidad internacional y organizaciones como la Unión Europea y La Corte Penal Internacional (CPI) intervengan con «acciones firmes y concretas» a favor de los presos.
«Necesitamos que volteen los ojos hacia allá. No solamente es decir y hacer comunicados. Es poner una mano firme», instó Merchán.
Ledezma precisó a EFE que los familiares «simplemente lo que están pidiendo es el trato humanitario» para sus seres queridos. «Aquí hay familiares que tienen años que no ven a su hijo, a su hermano, a su tío, a su primo, a su esposo…(…) venezolanos que son sometidos al esquema de la desaparición forzada».
«Ya no es solamente los 943 presos políticos, entre los cuales se cuentan ciudadanos de origen español» continuó. «Tenemos un país fracturado, nueve millones de seres humanos afuera, millones de venezolanos padeciendo adentro una crisis de hambruna, un desplome económico, un proceso de estanflación, porque tenemos la inflación del 200 por ciento, la más alta del mundo», apuntó.
Según Merchán, todos los «presos políticos» en este momento «son nuestros hermanos», comentó también a EFE. Y aseguró que los presos «no tienen visita de sus familiares en todo este tiempo que han estado detenidos», lo que viola sus derechos.
Añadió que, no son sólo los presos los que sufren las consecuencias, sino que también los familiares padecen la «persecución del régimen» de Nicolás Maduro. Aseguró que «son más de 18.000 familias que están perseguidas por ellos. Los familiares de los presos políticos también sufren las consecuencias.»
Pero no pierden la esperanza. «Lo importante es no olvidar, lo que más daño les hace a los presos es el olvido», apostilló Merchán. Y Ledezma lanzó un mensaje de perseverancia: «Hay razones para seguir luchando, la opción nunca va a ser rendirse».