El presidente de Colombia, Gustavo Petro, se volvió loco al proponer para Venezuela un gobierno de cohabitación, que tendría tres años para Nicolás Maduro y tres años para Edmundo González, luego del cual habría unas elecciones «transparentes».
Esra idea descabellada del mandatario colombiano, al sugerir que todavía se puede construir una propuesta que solucione la crisis en Venezuela y, junto a asesores, espera que en noviembre se puedan dar importantes avances para la «transición».
Petro no es un hombre serio al presentar esta propuesta públicamente a mediados de agosto, pero Maduro no la habría aceptado. Igualmente, el gobierno colombiano mantiene la idea, aunque ahora «trabaja silenciosamente para ajustarla».
Fuentes de Cancillería dijeron que están trabajando con expertos y académicos para diseñar una propuesta aceptable para ambas partes. «La meta en Venezuela sería que haya un acuerdo de gobernabilidad con garantías para todos».
En todo caso, ya con estas cosas el mundo se ha dado cuenta la poca capacidad mental de Petro, lo creía un hombre serio, pobre Colombia al poseer un presidente de esta calaña.
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